lunes, 29 de junio de 2009

DENTRO DE TI

http://www.youtube.com/watch?v=SO-gVufnJcE
El aire despliega sus alas para disfrutar del paisaje hermoso que se encuentra a su alrededor. Vivaz, místico y travieso no cesa de bromear con los arboles, haciéndoles cosquillas, de tirar al agua del lago a unas maduritas hojas, de ser la celestina de miles de flores, trasportándoles a sus amantes a la misma puerta del mundo magico. La locura es su adjetivo mas locuaz, tan solo se deja llevar por sus deseos, por sus juegos y esta vez le dejaron cerca del fuego mas abrasador.
Arrasa con todo lo que se encuentra en su camino, provocando un inmenso gozo o un reguero de destrucción. Solo el consigue que el aire desee descansar en tierra. Solo por el, el fuego se elevaría a los cielos.
Tan solo necesita bucear en las llamas de sus ojos, y en el aroma que su compañera, la brisa, le trae, para conocer sus más íntimos secretos. El aire le reta con complicados juegos que ponen su control al límite. La hoguera aumenta en llamaradas incontroladas, se extiende por los prados siguiendo al aire en un baile de dos cuerpos enloquecidos. Una conexión mágica que nos envuelve en una paisaje extraño, donde el cielo rojo anaranjado proclama un intenso sentimiento.
El fuego y el aire, una vez fueron amantes. Una irrefrenable atracción que tan solo pudo exterminar las lágrimas de los dioses, que vieron su reino marchito por un amor imposible.
En las noches de junio, todavía se escuchan las risas del aire al sentir las chispas del fuego en su esencia y los gemidos del fuego, al recorrer el aire su ser llenándole de frescura, calmando su calor.

Insthar Malar

(01/04/2009)

domingo, 28 de junio de 2009

DONDE ESTAS



Solitario en mi hogar, donde unos días atrás se escuchaban las risas de mi princesa. Cada estancia impregnada de su aroma, de su alegría, ahora rezuman tristeza y melancolía. Su apacible tacto ya no roza mi piel, ya no envuelven con sus manos las rosas, antes de robarles su esencia, ya no.

Se fue tan lejos…

Apalancado en mi butaca, con la mirada al infinito, dejo volar la mente. Tan solo, ella esta en mis sueños. Solo ella acapara toda mi atención, todo mi tiempo y toda mi alma. La necesito y debo ir en su busca.

Donde había nostalgia, oscuridad y abatimiento, fluye el rio de la esperanza que nace de las rocas de la fortaleza, para bañar las tierras de la valentía, donde brotaran de las semillas del amor, nuevas ilusiones como frutales preñados de vida.

Una carrera contrarreloj por las calles donde paseábamos cogidos de la mano, pendiente de un mínimo atisbo de su ser. Mis ojos enloquecen buscándola entre la gente. Mi cabeza da vueltas. Los deseos, la desesperación y la realidad juegan a las cartas en ella y como una jarra de agua helada cae sobre mí, cuando no la encuentro, devolviéndome al presente y abandonando al pasado en una pared de mi corazón.

Sentado en el banco del parque, observo una potente luz que me invita a adentrarme en ella. Abatido me encamino a una paz inducida. Una inmensa puerta blanca y dorada se impone ante mis ojos, tras ella el cielo se abre a mis pies. Un estallido de alegría y gozo explosiona en mis adentros. Miles de neuronas brincan ante una nueva esperanza, que se precipita al vacio más negro, cuando me niegan su presencia en el cielo.

Escucho sus palabras como susurros lejanos, me pide que no la olvide, que siga buscándola. La frustración, campa a sus anchas en este cuerpo destrozado y cansado, pero tan solo el recuerdo de sus besos, de esos besos donde me regalaba un pedacito de su esencia, me da fuerzas para llamar a las puertas del infierno en su busca. Retare al mismo demonio para volver a danzar al son de su acompasada respiración, aunque en el camino me convierta en polvo de estrella.

Con una mirada de desprecio y una carcajada atronadora, que sonó entre llamaradas incontroladas, el ser oscuro que rige el infierno proclamó la ausencia de esa apetecible dama.

Fijó su rabiosa mirada en los abismales ojos del demonio, fue tal la fuerza destructora y salvaje que destilaba en ella, que hasta el mismo demonio acallo sus risas de pronto. Decidido comenzó a correr sin encontrar obstáculos en su camino. La desesperación no le dejaba sentir, el deseo de sentirla en sus brazos nuevamente le había cegado ante los sentimientos más profundos. Un palpitar cada vez mas intenso repiqueteaba en su pecho. Desde que ella se marcho le había acompañado pero hasta ahora no lo escuchaba. Le llamada paciente y cariñosamente desde su propio corazón, donde ella había permanecido todo este tiempo.


Ese era su nuevo hogar. Ni Ángel en el cielo, ni una lujuriosa compañera de Lucifer en el infierno. Ella siempre seria su princesa y descansaría en su corazón.


Insthar Malar

(23/09/2009)

sábado, 27 de junio de 2009

EL DESTINO

Mirando al mar, desde lo alto del faro, sentí que de mi piel se desvanecía la magia, el brillo que me hace resplandecer más que el sol. Sentí que mi corazón deseaba salir de mi pecho, defraudado por mis acciones. La tristeza comenzó a devorar mis órganos, secando mi apetito, borrando mi sonrisa, agujereando mis pulmones para que el oxigeno se escapara por ellos y así, no permitirme respirar, mi alma me dio la espalda recriminando mi actitud.Mirando al mar desde lo alto del faro, sentí que me abandonaba, que la soledad volvía a ser mi compañera de viaje, sentía que la alegría se marchaba, sentía que volvía para desaparecer. Se acercó, distante y reservado, palabras mudas volaban por el cielo hacia mí. Mi cuerpo paralizado despertó de repente, cuando mi corazón pego un salto en mi pecho instándome a actuar. Mis piernas caminaban solas hacia él, mis brazos le rodearon con ternura siguiendo las órdenes de mi corazón ,que había tomado el mando de mi cuerpo. Le miré con los ojos tocados por mis lágrimas. La tristeza reinaba en nuestros cuerpos, almas destinadas a volar separadas aunque con su lucha intentaban impedirlo.Aprisiono sus labios con los míos. Cierro los ojos, intentando ejercer toda la fuerza posible para que no se marche, en mi mente suplico que no deje de besarme. Despacio, muy despacio acaricio sus labios . Su boca baila un tango junto a mí, tierno hasta el delirio, sensual hasta el éxtasis, melancólico y ensordecedor. El silencio rige la torre del faro, pero mi alma solloza rindiéndose al destino. El último adiós a mi sonrisa, a mi luz, se fue tras un beso maravilloso, que recuerdo con tan solo cerrar mis ojos.
Insthar Malar

(11/03/2009)

viernes, 26 de junio de 2009

DEAD FOR YOU





El reflejo del espejo le regala una enigmática imagen. Desnuda ante el, repasa las cicatrices de su cuerpo, invisibles a los ojos ajenos, pero marcadas en su retina y en su memoria. Su pelo mojada cae sobre sus hombros y tapa su rostro. Las gotas de agua huyen de su cabello, recorren su espalda, hasta precipitarse al vacio por la pendiente de su glúteo. La sensación refrescante impregna a nuestra dama de una nueva identidad. El riesgo, la excitación corre sin remedio por los circuitos de su cuerpo.
Con las manos se retira el pelo de la cara, peinándolo hacia atrás .En ese momento, una mirada desafiante se fija en el espejo, en esa desconocida que queda atrapada en el. Esta es su noche, una sonrisa maquiavélica florece en su boca. Se dirige al ropero de donde elige un vestido negro ajustado, con un escote que descubre una seductora espalda, que atrae lascivas miradas. Unas pantis comienzan su aventura desde el pie, acarician sinuosamente la delicada piel de sus piernas, para acabar maniatadas en su ligero negro. Tras calzarse los zapatos de tacón alto y guardarse unas dagas en sus ligas, se dispuso a salir de la habitación.
Su larga melena negra y ondulada le ocultaba parcialmente el rostro. Su elegante y seguro caminar provocaba el ensimismamiento de los hombres, que se cruzaban en su camino, a los que despreciaba con una mirada. Su objetivo era claro y no dudaría hasta conseguirlo, y aquel que osara interponerse en él, acabaría con sus huesos en un agujero, mientras su familia llora su ausencia.
Cruzó la calle hacia su primer objetivo .Se acercó a un aparcacoches, le susurro al oído y le acaricio con la lengua el lóbulo de la oreja. El chico quedo paralizado con una sonrisa estúpida en la cara. Nunca sabremos que palabras utilizo para provocarle ese estado. Cogió las llaves de un descapotable y se marcho de allí.
La adrenalina corría por sus venas cuanto mas pisaba el acelerador. Estaba cerca de su propósito. Tras varias calles llegó al lugar de encuentro. Aparcó bajo una farola fundida y bajo con elegancia del coche. Se meso su cabello, se ajusto el vestido y sus atributos y se dirigió hacia su misión. La templanza controlaba la excitación y el deseo. Cualquier fallo echaría en tierra toda la misión. Subió las escaleras contoneando sus caderas ,sobre 15 centímetros de tacón que dominaba sin problemas. Antes de entrar en el local, miró a su espalda .Todo bajo control, pensó.
Con la ayuda de su daga, abrió la vieja puerta y sigilosamente se adentro en la estancia. En ella tan solo se encontraría a un hombre y a su objetivo. Era una planta baja diáfana donde se preparaba aquello que buscaba.
Los tacones la delataban y el hombre le saludo. Esperaba su visita, pues también tenía sus fuentes.


- Ya has llegado…
El silencio fue la única respuesta de nuestra dama.
- Te esperaba…
- Tan solo vengo con un propósito.- digo ella.
- Lo se ,la simpatía y amabilidad no han sido tu fuerte nunca.
- Porque tendría que serlo contigo?
- Porque estas bajo mi poder…. Puedo provocar en ti el delirio…. La frustración… o la rabia.
- Pequeño, tan solo eres un peón en mi juego.
Esta vez no cedería ante sus envites y le cedió lo que venia a buscar.
Una caja contenía aquello que le arrebataba el control, aquello por lo que utilizaría sus dagas sin temor.
Impaciente abrió la caja y se presentaron ante ella una maravillosa orquesta de pasteles .Con yema, de fresas y nata, de crema. Ante la atenta mirada del pastelero, ella cayo en la tentación y se llevo a la boca un pastel recubierto de yema tostada, sus preferidos.
De pronto, noto la lengua acartonada, los miembros paralizados le impedían huir. El veneno viajo por todo su cuerpo, hasta que la dejo tendida en el suelo con tan solo sus ojos como arma y testigo.
El la recogió y la llevo a una butaca.
- Dulce damisela, tu arrogancia te ha llevado a un difícil problema.
Aunque inmovilizada, su mirada desprendía tranquilidad. Sus ojos azules se clavaron en los de el, hasta profundizar en su alma. Mientras el farfullaba y se crecía ante la situación, ella rebuscaba en su interior sus miedos, sus deseos, sus inquietudes.
La primera imagen exploto en su mente, separándole de ella y tirándole al suelo. Asustado, no comprendía lo que le ocurría. Un bombardeo de crueles imágenes, oscuras, tétricas se condensaban ante el. Gritos de pavor huían de su garganta repeliendo aquellas imágenes. El miedo se apodero de su alma, llevándola a un cuarto oscuro. Acurrucado, gimoteando permaneció hasta que el veneno desapareció del cuerpo de nuestra dama.Enfurecida ante tal osadía, apoyo su pierna en los hombros del pobre hombro y de su liguero saco la daga verde. Con su afilada hoja acaricio el rostro y el gaznate del incauto. Presiono la daga a la altura del hombro para que este recordara a cada momento quien era su dama. Y a quien debía su vida. Tras la advertencia, salió de allí buscando otro objetivo. Su felina mirada buscaba una nueva victima.


Insthar Malar

(22/03/2009)

miércoles, 24 de junio de 2009

INVENCIBLE



http://www.youtube.com/watch?v=v3FqSC7SFIk
(Indispensable escuchar esta cancion)


En la cumbre me encuentro. El sudor, el barro y las huellas del tiempo son mi único vestido. En el arduo camino dejé aquello que tan solo me hacia mas débil, mas pesada. Aquello que me impedía avanzar, con la agilidad que anhelaba.

He caminado por lodazales, donde cada paso era una lucha contra la tierra, que intentaba hacerme suya. Mi pie quedaba sometido a los caprichosos deseos de la tierra y el agua, dos elementos imponentes, que unían sus fuerzas con el fin de robar mi luz. Alrededor de mis tobillos sus garras se aferraban, como un hambriento a una hogaza de pan, con la intención de introducirme en su esencia, convirtiéndome en parte de ellas sin identidad propia. Aunque mi mente me enseñaba las bondades de la tierra, no me dejé vencer.

Mis ojos relucen ante mi enemigo. Mis músculos se contraen hasta el desfallecimiento. En mi cabeza tan solo unas palabras…. Eres invencible¡¡¡. A cada paso, mis tobillos se liberaban de sus ataduras con la ayuda de todo mi ser, hasta caer rendida pero triunfante al otro lado del lodazal.

Sibilinas y atrayentes mariposas me hechizaban con su vuelo, hasta trasportarme a lugares inciertos y oscuros, donde su belleza dejaba paso a pálidos rostros de miradas vacías, que intentaban succionar mi sangre . Esa mirada altiva y arrogante no ocultaba sus viles intenciones y despertó con sus dulces patrañas a la pantera, mí esencia mas cruel.

Su fiereza es equiparable a su elegante caminar. Tu peor acción ,ante esta bella y destructora fiera, es mirarle a los ojos. En ellos, sentirás un fuego abrasador que convirtió a ese magnate de la petulancia en cenizas y humo. Una mirada azul y una sonrisa retadora será lo único que recuerden mis enemigos, pues el dolor lo sentirán siempre.

Las frías aguas de la soledad han acariciado mis agotadas piernas y mi desvencijada espalda. He nadado contracorriente y me he dejado llevar por remolinos de placer. Me convertí en sirena para viajar junto a los peces más hermosos y retar a los tiburones más peligrosos. Y sigo aquí, la oscuridad no ha conseguido mitigar mi luz, mis ganas de vivir, de conocer y de luchar. Pues soy invencible. Las cicatrices cubren mi piel tostada, las tiritas esconden nuevas heridas que pronto sanaran, mi corazón cubierto de escarcha no responde a dulces palabras. Soy invencible.

En la cumbre me encuentro, he luchado contra los elementos para respirar el aire más puro y tener bajo mis pies la tierra que me da la vida y que respeta mis decisiones. Mis ojos tienen como horizonte nuevas montañas. Esta, en la que descanso ahora, no es la única, ni la mas bonita, ni la mas mágica pero he llegado a su cumbre y he ganado.

Desde aquí, he despedido al sol, sentada en la hierba y disfrutando de mi victoria.

Llega la luna y con ella, mis sueños. Nueva leña para mi hoguera.

“Cuando la oscuridad te abrace, y el miedo te haga enloquecer……
recuerda que eres invencible” Nada Suite


Insthar Malar

(27/03/2009)

Y EXPLOTÉ¡¡¡



Noto sus caricias por mi cuello. Es la mejor manera de despertar, con unas suaves manos rozando mi piel. Sin abrir los ojos noto como su boca acorrala la mía. Delicado y excitante, siento su calidez en mis labios. Con sus manos acapara todo mi cuerpo. Acaricia sutilmente mi cuello mientras agarra mi trasero con firmeza. Me encuentro en el limbo del placer. Mi ser comienza una danza sensual y lujuriosa. Como la brisa marina, una bocanada de aire se muda a mi interior. Consigue que mi cuerpo se infle de libertad, de felicidad, de sensaciones nuevas y rejuvenecedoras. Sigo volando en este remolino de pasiones, en este torbellino de sensaciones. Otra bocanada se acomoda en el salón de mi cuerpo. Una explosión de jubilo me sobrecoge y trasforma mi escuálida silueta en una rolliza anatomía. Me siento pesada, ya no es tan divertido, ya no floto en mi mundo. Estoy decaída, cansada y apática.
Pero al maldito huracán no le importa, y vuelve a regarme con una bocanada de aire, esta vez inmensa. No puedo mas, mi cuerpo antes delicado y efímero, se ha convertido en un balón acartonado e insensible. El mal humor, la rabia vuelve mi color a un morado oscuro. No aguanto más. Por mi boca noto como se adentra un indefenso hilillo de oxigeno que hace estallar mi ser en mil pedazos. No puedo mas¡¡¡¡. Y exploté.
Insthar Malar

(25/02/2009)

lunes, 22 de junio de 2009

SOMBRA TRISTE II



Han pasado muchas noches desde que le avisto por primera vez, con su semblante perdido y triste. Desde entonces le acompaña en cada paseo al pasado, en cada cruce de caminos, su ángel del viento esta a su lado. En cada encrucijada de su mente, ella esta ahí. El no puede verla, tan solo tuvo una oportunidad de ver su mirada pura y cálida. Esa noche le traspaso una pizca de esperanza, de ilusión. Ella tiene un don, trasmite tranquilidad, paz, y esperanza, con solo bucear en sus ojos casi transparentes.

Esa oscura noche, el dolor aquejaba el corazón de nuestra sombra triste, su mente volaba saltando entre sentimientos de estupidez, desamor, y soledad. Tan solo deseaba una mano que apretar cuando sentía miedo, una mano que besar cuando la emoción le embargaba, una mano que coger suavemente mientras paseaba por la playa. Pero, tan solo había un cuerpo anquilosado de no vivir, una mente marchita de no disfrutar, unos ojos apagados, ciegos a la belleza de las pequeñas cosas.

El destino quiso que en su vida se topara con un rayito de luz. Un ser alegre, alocado y divertido que con su actitud robaba esencias al mundo mientras el reloj no paraba de hacer tic tac. Un ser que disfrazaba sus tristezas con vestidos de seda y zapatos de colores. Una sonrisa sincera y juvenil se dibujaba siempre en su cara y un abrazo esperaba impaciente en su cuerpo, a encontrar a quien regalarlo.

La oscuridad y la luz. La tristeza y la alegría. Una sombra y un alma con un solo anhelo, desterrar la soledad de su reino. Tan solo una mano amiga a la que poder aferrarse cuando sientes el aire en tu cara, cuando notas que el abismo se apodera de ti oprimiendo tus pulmones y robándote el aliento, cuando el miedo te eriza el vello y te aparta de tus sueños.

Desde el punto más alto de la ciudad, el Ángel del viento observa a estas dos almas solitarias. El deja escapar una lágrima de impotencia, la lucha en su interior es demasiado cruenta para enfrentarse un solo guerrero, aunque sea el más valeroso. Ella, con cariño le acaricia la mejilla llevándose consigo su tristeza.

Tan solo, cógele la mano, para que el camino no sea tan duro.


Insthar Malar

(08/03/2009)


Especialmente para mi sombra triste.


Para leer la primera parte de Sombra triste....

http://aziwa.blogspot.com/2009/04/sombra-triste.html

jueves, 18 de junio de 2009

DESNUDA

Una noche más volvía sola a casa. Tras una velada insustancial y aburrida, en la que su atención se ocupó en volar por mágicos escenarios que figuraban en su mente, y de la que ningún comensal le arrebató con ninguna fascinante conversación.Abrió la puerta de su apartamento con desgana y abstraída de la realidad. Tiró las llaves en la mesita de la entrada y encendió las luces como cada noche. Sus pasos se dirigieron a su dormitorio, mientras se desprendía de los zapatos por el camino.
Su habitación presidida por una cama grande con un edredon de plumas ,de colores que iban del rojo al anaranjado conjugados con el blanco. En la pared, volaban mariposas de colores entre rostros de expresivas africanas teñidas de rojo.

Dos mundos muy distintos enfrentados, la dualidad era su compañera de viaje. La fantasía, la magia, los sueños frente a las raíces, la dureza y la fuerza. Al lado de la ventana que daba a la calle, se encontraba un espejo de cuerpo entero y al otro lado una confortable butaca.Entró en la habitación a oscuras, hasta llegar a la mesita de noche donde encendió una tenue luz, que permitió verse reflejada en el espejo. Miro fijamente a esa figura que estaba encerrada tras él, se parecía a ella pero era muy distinta a su mirada. Presiono el botón del play de su ipod y comenzó a sonar esta canción.



Cerró los ojos, y se dejó llevar por la magia . Sus músculos se relajaron, sus manos se movían lentamente formando figuras en el vacio. Se deshizo de la goma que aprisionaba su pelo y dejo en libertad sus sentidos. Su pelo azabache ocultaba sus hombros, mientras ella seguía moviéndose al compas de la melodía. Sus ojos seguían cerrados, intentado borrar los sinsabores del día, vaciando la mente de oscuridad.Sus manos viajaron desde su delicada tez, por el escarpado cuello hasta el viaducto que cruzaba sus pechos. Su vestido negro, que estilizaba su esbelta figura, estaba al borde del precipicio. Con sus dedos largos y delgados dejo caer el primer tirante sutilmente a los largo de su brazo a la vez que la respiración acompañaba al bateria y su alma volaba por un universo cálido y acogedor. Con su dedo índice recorrió el espacio que separa un hombro del otro y deslizo cuidadosamente el tirante del vestido hacia el infinito. Estiro los brazos al techo mientras su cuerpo dibujaba ondas en el aire. La imagen del espejo la miraba absorta en sus sensuales movimientos. Ella peino su cabello hacia atrás para descender por su ardiente cuerpo, arrastrando la segunda piel que la cubría. Su vestido, tras un peligroso trayecto por sus sinuosas curvas, descansaba a sus pies descalzos. Entonces sus ojos verdes volvieron a brillar bajo su universo y ante su reflejo. Allí se encontraba desnuda ante una desconocida , sin nada mas que sus sueños y su esencia. Sin nada mas que sus deseos y su vitalidad, sus hadas y su garra.

Ella , solo ella.


Insthar Malar

(17/03/2009)


PD: Gracias a Fire por compartir esta cancion....

miércoles, 17 de junio de 2009

MI PRIMER RELATO EN AUTORES REUNIDOS....


En mi nueva incursion literaria ,que de la mano de Calvarian me ha llevado al Blog de Autores


Reunidos, me complace invitaros a leer mi primer relato ,publicado en este blog. Espero que os


guste.....


HECHIZO ----Insthar Malar




Un saludito


Insthar

DERROTADO


(2ª parte de RABIA)
Tumbado en contacto con la fría y húmeda tierra me invade el fantasma de las lágrimas, aquel que intenta escapar por mis ojos, de la tristeza y la frustración que me absorbe. Pero lo que desconoce, es que aunque escape de mi ,como gotas de lluvia cayendo por mi mejillas, la sensación de derrota seguirá recluida en mi cuerpo ,en mi mente ,en mi ser.
Lo intente todo. Con rabia trasmití toda mi fuerza a la tierra, pero esta no me ayudo y resbale sin poder escapar de mis cadenas. Cerré los ojos ,me evadí, relaje mi cuerpo ,mi mente y pensé. Por un instante, una idea me estallo en la cabeza, como no me había dado cuenta. Un rayo de optimismo me traspaso, la alegría, la ilusión volvió a mi rostro. Lo intente con todas las fuerzas pero fallé.
Estoy condenado a perecer bajo este árbol, sin ninguna salida más que esperar a que el destino o este roble se apiaden de mí. Derrotado tras haber fallado .No encuentro salida y no quiero buscar más. Tan solo, tumbarme aquí, en el frio suelo.
Un sopor me relaja los músculos y cierra las ventanas de mi alma. Mis garras se esconden, ya no saldrán más. Tumbado me dejo ir. No se donde volaré pero por fin, seré libre.


"La peor derrota de una persona es cuando pierde su entusiasmo"

H.W.Arnold


Insthar Malar

(23/02/2009)

martes, 16 de junio de 2009

RABIA



Un collar de hierro aprieta mi cuello. De el cuelgan cadenas que atan mi deseo a un inmenso roble. En un claro del bosque me encuentro luchando con mi vida por acercarme a él.

La rabia condena a mi espíritu, apacible y sereno, a una locura irracional. A la desesperación más amarga y desgarradora. Mis ojos se asoman peligrosamente al vacio del mundo. Como un imán, él los reclama. Su energía los atrae inexorable a su destino.

De mi boca, repleta de colmillos y supurando una mezcla de odio y deseo animal, se cuelan alaridos, voces del submundo de mi mente que enseñan mis más salvajes sentimientos. Mis patas aprietan fuerte la tierra. Cada musculo de mi cuerpo se tensa para acercarme un centímetro más a mi objetivo. Las garras se clavan en la tierra, levantando la hierba y aniquilando las pequeñas florecillas que allí descansan. Cojo impulso y con fiereza me lanzo contra él, mientras de mi garganta se escapan angustiados gritos que descomprimen mi alma de la frustración de mi condena. Pero el roble es más poderoso que mis débiles patas, las cadenas ahogan mi ser, mis deseos se escapan sin poder alcanzarlos.

Caigo al suelo. Mi cuerpo esclavo de la extenuación, destrozado pero no derrotado. Los últimos suspiros de anhelo recorren el umbral de mi alma, en busca del vuelo liberador que sosiegue mi ser. La venganza hierve en mi mirada, en mi mente corretean las neuronas ideando el plan que me de la gloria.

He caído , pero volveré a levantarme hasta alcanzar la gloria.


Insthar Malar

(13/02/2009)

domingo, 14 de junio de 2009

RADIANTE



Son las diez de la mañana y las luces de casa se encienden. Es hora de despertar.
Disfruto mirando a las personas escrutando cada objeto apilado en las estanterías, buscando la pizca de magia, un ápice de autenticidad. Buscando aquello que no poseen y desean.
Hace días que a la tienda viene una joven tímida que desprende un aura radiante. Desde el primer día, pasa por mi lado, me mira de soslayo y se marcha al pasillo de papelería. La observo y cada día deseo que vuelva. Es como un ritual. Ella entra, una primera mirada, un acercamiento, una mueca de frustración por la imposibilidad de llevarme con ella y la búsqueda de un dulce, que le arrebate el amargo sabor de un sueño incumplido. Si ella supiera que nada es imposible, que me tiene en su mano, que si mi cuerpo pudiera hablar, le llamaría a gritos y se lanzaría a sus brazos, pero tan solo soy una vela que desea ser prendida.Han pasado meses y cada día veo su sonrisa escondida, cuando se acercaba a mi. Intentando mover mi cilíndrica forma para percibir ese aroma que me embriaga, hice tambalear a mis compañeras de estantería, pero al marcharse su pelo bailo con el aire y desprendió su perfume, a florecillas y miel, que me hizo desfallecer.
Efímeros instantes que me hacen volar hasta el siguiente día.
Comenzaba el verano. Un nuevo día con ilusiones siempre perennes. Mientras despertaba de un sueño mágico, sentí una mano delicada y pequeña coger mi cuerpo. Asustado abrí los ojos y la vi. A dos centímetros de mí, estaba esa sonrisa tímida. Me saco de mi cautiverio y me llevo a su casa. Acomodada en su mano y con la tez apoyada en su pecho, tan solo deseaba no despertar.
Junto a su foto, me colocó con cariño y encendió mi mecha. Empecé a arder .Iluminaba la estancia mientras el fuego consumía mis entrañas. Cada segundo que pasaba, la llama se hacia mas potente, crecía como un rio en días de tempestuosa lluvia. Cada noche apagaba mi mecha con un sutil soplido que sentía como una caricia en mi piel, mientras una hoguera llameaba en mi corazón devorando mi mente repleta de deseos. Así pasaron los días, la mecha siempre prendida mientras me sentía diminuto a tu lado, insignificante ante tus ojos .Poco a poco, el torso imponente menguaba como la luna dejando lugar a una sombra de lo que fue. Mi corazón se derretía del dolor, de la apatía de mi niña de blanca tez .
Una noche dejaste de acariciar mi piel, y la llama de mi ser fue mitigando su calor, su luz ,hasta que no fue tu calido suspiro, sino el frio viento el que me apagó.

Insthar Malar

(11/02/2009)

sábado, 13 de junio de 2009

EN TU MANO




Un día yacía en tu mano como tu luciérnaga, aquella que graciosamente te daba una pequeña luz, que decías, daba calor a tu interior. Una luz que ahuyentaba tus fantasmas, y tus momentos de oscuridad.

Soy diminuta, de cuerpo delicado y ligero. Tu mano es un mundo inmenso inexplorable .Un delicado paraíso en el que descansar y disfrutar de tu suave tacto. Tan solo un movimiento de tu dedo índice acabaría con mi vida. Tan solo una pequeña presión liquidaría mi ínfima existencia. Tienes mi vida en tus manos. Ni con mis pequeñas y trasparentes alas podría escapar de la inexorable razón de tus deseos. Soy tu cautiva.

Pero, ya no descanso en tu mano. Me llevaste de viaje, del paraíso de tu piel, a un frío palacio de cristal, desde donde te observo. El sonido de tus risas llega a este rincón. El mismo con el que me deleitabas, cuando sentías cosquillas por el tacto de mis patitas en tu mano. Ya no te parecen graciosos los movimientos rítmicos de mis alitas, ni la forma de acurrucarme entre tus dedos. Bajo mi sonrisa mendigante de atención, fueron diluyéndose tus cariñosas palabras, tus suaves y delicadas caricias, las chispitas de tus ojos cuando jugueteaba con mi lucecita.

Apostada en la pared de mi palacio entro en un sueño. Mi luz se va volviendo tenue. Mis ojitos se van cerrando, pero le veo a lo lejos, riendo sin mí.

insthar malar
(09/02/2009)

viernes, 12 de junio de 2009

PRESA

Tocan a la puerta de mi boca, pidiendo salir de ella. Tras un largo trayecto desde lo más recóndito de mis entrañas, aparece tímida pero con vitalidad, pidiéndome salir al mundo. Golpea con fuerza el interior de mi boca, incluso tira firmemente de mis labios, pero el duende que habita en mi torre, ignora su petición. Cae pensativa en mi lengua y unos segundos después, noto cosquillitas en ella y sus pequeños piececillos suben por el conducto de mi nariz. Por un momento, la idea de un viaje por el tobogán de esta, se me pasa por la mente, pero con sorpresa, me percato de que sigue su rumbo hacia … mis ojos¡¡¡.


Posa sus diminutas manos en el mirador de mi cuerpo. De un cristal azul casi trasparente, admira un paisaje maravilloso. Y noto que produce en ella la misma sensación que en mí. Rezo por que entienda su reclusión, pero para mi desesperación, con pequeños golpecitos continúa su misión. Comienza a saltar, a hacer muecas, a mover los brazos. La congoja toma el poder en mi mirada y aquel que bucee en ella, sabrá lo que oculto.


Una persistente frase lucha por salir de mí. Cierro los ojos, desvío la mirada del objeto de mi atención. Pido a los ángeles que cese esta tortura, que esta frase caiga agotada y se de por vencida. Pero nuevamente la oigo corretear, en dirección a la torre.


Se encara al duende que maneja este cuerpo aletargado. Se encadenan en una lucha imposible de seguir, pues sus mentes lucidas vuelan en argumentos en este abrupto debate. Lucha sin tregua donde la joven frase no se amedranta ante el sabio duende. La pasión de ella acaba venciendo a la razón del duende, pero ya es tarde. Mientras ellos comparaban su fuerza e inteligencia, mi tren partió hacia otro rumbo.


Sentada en el banco de la estación, escucho los pasos apenados y marchitos de esa frase, que vuelve a lo más recóndito de mis entrañas.



Insthar Malar

(01/02/2009)

jueves, 11 de junio de 2009

DELICIOSO


Bajo el sol de junio saboreo un helado de vainilla con trocitos de chocolate y dulce de leche. La combinación perfecta. Es mi momento. Todos los astros están alineados. Me encuentro frente al mar, el sol calienta mi piel bronceada, una sonrisa sincera prende mi rostro y en mi mano, un pecaminoso manjar para mi paladar. Por el intenso calor, la bola de mi cucurucho se derrite ante mis ojos. El dulce de leche cae sin remisión, pero mi avispada lengua no puede permitirlo. Como una imperturbable camaleona despliego mi arma de devorar para salvar a la indefensa gota de dulce. Un estallido de gloria inunda mi boca y despierta las neuronas, y demás criaturas que habitan mi cuerpo. Miles de duendecillos que se agolpan en mi garganta, en mi piel, en cualquier lugar donde poder sentir de cerca esa maravillosa y placentera sensación.Con mi dedo, arrastro un poco de helado que sin demora regalo a mi boca. Cierro los ojos, para atrapar ese frio tan excitante. El contacto de la vainilla con los átomos de mi cuerpo, provoca que me trasporte a otra dimensión. Por un instante, he perdido la noción del espacio, del tiempo.
Desorientada intento fijar la mirada. Una espesa niebla me impide ver. Pasan unos segundos hasta que consigo adaptarme a la nueva situación. Hummm…., y la nueva situación me parece interesante.Sigo en la playa, el sol alegra el día con fuerza, mi sonrisa es aun mas intensa pero algo mas picara, y mi mano coge la mano de mi adonis. Le vuelvo a mirar. (Diosssss, no me lo creo). Hasta las palabras han enmudecido en mi garganta. Atónitas observan los giros del azar. No es momento de pensar, empiezo a correr tirando de el, que sonríe sin conocer nuestro destino.

La arena de la playa es increíblemente blanca. Con sutileza le invito a tumbarse en una cama a base de grandes hojas de frutales. En mi mente, tan solo veo su cuerpo y miles de torturas que experimentar en el. Un torso esculpido por el mismo Zeus, sus hombros cincelados por las bellas ninfas de las montañas.Sus piernas, obra maestra de la arquitectura, esconden el tesoro mas deseado por las Diosas del Olimpo. Sus ojos, perlas negras que Afrodita robo al propio Hades del infierno. Ella fue la que dibujo sus labios carnosos y apetecibles. Y la primera que probó su esencia dándole vida a este ser perfecto. Fijo mi mirada en su ombligo. Mi lengua recorre las jícaras de su abdomen. Pequeños mordisquitos que mutilan su cuerpo y derrochan su esencia de chocolate trastornando mis sentidos. Un pecho definido y poderoso que infunde protección y deseo. Me apodero de su pezón como si de una guinda se tratase, pero no es suficiente y rapto a su gemelo inseparable.Mis manos acarician sus fuertes brazos mientras el me acorrala en una abrazo enérgico. Atrapada en un torbellino de lujuriosa y ferviente pasión, me adentro en busca del oscuro objeto de deseo, de la propia Diosa Afrodita, sus labios.
Cual pantera me dirijo con paso firme y con la mirada puesta en mi presa. Será mío. Con mi dedo acaricio sus acolchados labios preparándole para el asalto. Mi verde mirada no deja libres sus perlas negras, que brillan impacientes por la incipiente lucha. Apreso con mis labios los suyos, saboreo lentamente este placer del destino. Arresto con mis dientes su labio inferior. La dulce tortura se hace insoportable hasta el delirio. Un salto al infinito de la mano de mi Adonis. Absorta en mi cacería, percibo unas cosquillas en mi hombro derecho. Una mano dibuja en mi piel figuras abstractas .Tardo unos segundos en darme cuenta que no son las de mi guerrero, pues yacen en mis atributos. Giro mi cabeza para reconocer al dueño de esa mano y el sol me deslumbra con su poder.
Poco a poco, mis pupilas se acostumbran a la luz y descubren apenados la desaparición de mi helado, y cual vampiro tras su cena, en la comisura de mis labios habitan los últimos indicios de la esencia de el. Mi maravilloso helado de vainilla, chocolate y dulce de leche.
Hummm.....
Insthar Malar
(02/02/2009)

miércoles, 10 de junio de 2009

PERDIDO

¿Donde esta? Hace un instante, cogía de la mano a todo mi mundo. A la mujer de mi vida. A la que me construyo un mundo especial para mí. Aquella que me arropa por las noches, y que duerme con un ojo abierto por si algo me faltara .La que lucha contra fantasmas, enfermedades, y salvajes roba niños. Aquella que aprendió a volar para que yo fuera libre. Esa mujer inteligente y fuerte que regala su belleza al tiempo por verme sonreír. Pero, se ha marchado, me ha dejado.

Yo quiero tenerla cerca, sentir que su mano me coge fuerte. Miro a mí alrededor y no esta. Puede que se haya enfadado porque no quise comerme la sopa. Me siento en el suelo y mi mirada tan solo se fija en el suelo, en mi cabecita, recuerdo todas las veces que hice mal a mamá, que mis pataletas la pusieron triste y siento que eso pasara. Quiero volver a verla. De mis ojitos se escapa el miedo y la tristeza en forma de lágrimas. En silencio, lloro desconsoladamente, prometiendo que nunca más pondré triste a mamá.


A lo lejos, corria desesperada una mujer. Llamaba con insistencia a un pequeño. Omar decía. En esos instantes, como si un video juego se tratara, iba perdiendo vida poco a poco. Su rostro luminoso y joven perdía su firmeza para envejecer de repente. Su cuerpo antes fuerte, erguido y tonificado comenzaba a menguar, a languidecer, disminuyendo su tamaño, hasta parecer una anciana. A punto de desfallecer y caer desmayada, vio un bulto entre el gentío. El corazón volvió a palpitar con fuerza, la sangre viajaba por todo su cuerpo invocando a esa joven y bella madre .Respiro profundamente y se dirigió despacio hacia su hijo. Las piernas le temblaban, la voz se le quebraba, pero debía permanecer tranquila ante su niño. Con una sonrisa sincera y protectora se agacho donde se encontraba Omar y le acaricio la mejilla, mientras le decía: “Hola mi niño”. Le miro a los ojos y le cogió en brazos. Su corazón se quería fugar de su pecho. Omar tan solo la abrazaba, se escondía en su pecho, mientras gimoteaba. La besaba, la abrazaba, y se acomodaba en el pecho de su madre. En su cabecita, repetía una y otra vez “Nunca más, me soltare de tu mano”. La emoción le impedía poner letra a lo que su cuerpo gritaba, un amor sincero y pétreo.


Nunca más, soltare tu mano.

Insthar Malar

(23/01/2009)

martes, 9 de junio de 2009

OLAS



Miro al horizonte ,mientras el sol tuesta mis pequeños granos dorados, mi cuerpo se funde con el agua salada, que cansada, se posa en mi dócilmente. Tras largas jornadas de trayecto indómito y salvaje por los mares más bravos, llega agotada a mi playa. Las olas sin fuerza mueren a mis pies, en busca de una última caricia antes de seguir su camino. Solo atracan en mi arena para saciar su sed de cariño, llegan turbadas por un camino frio, desangelado y solitario. La visión idílica de esta playa les evoca un paraíso utópico, aquel que les ayudo a vencer ese cruel trayecto y que ahora, conquistan con sus envites cada vez más vigorosos y atrevidos.


Aparecen desde el infinito. Su sensualidad les trasporta ligeramente hasta mi, se posan en mi grumosa piel y me arrebatan, un suspiro excitado y diluido, como al despertar de un dulce sueño por una caricia que recorre tu abdomen. Efímeras caricias que se marchan, dejando un pequeño vacio y un anhelo. La mirada se pierde nuevamente en el inmenso mar. He vuelto a soñar despierta, a sentir como real, una ilusión de mi imaginación.


Una nueva ola se acerca .Con fuerza y alboroto recorre mi espacio, mi ser. Me despierto por las cosquillas y las carcajadas que me provocan , para descubrir que nuevamente se marcho, portándose con ella una parte de mí. Miles de granos de arena se han marchado con esa ola y ya no volverán, pero me dejo su aroma y una sonrisa por todo lo que me hizo sentir.


Espero la próxima visita. Siento como se acerca aun estando lejos. Arrolladora y enérgica, se hace camino hacia mi playa asombrando por su potencia e impetuosidad. Es grandiosa y todos los que la sienten se paran para ver su avance. Cierro los ojos y espero. Mi corazón palpita fuertemente .Siento que esta ola me llevara lejos, me arrastrara con fuerza y portara mi arena a otro lugar nuevo y vibrante. En mi mente, tan solo deseo dejarme llevar por el remolino enloquecedor que me regalara esta ola.


Con ímpetu me golpea, inunda todo mi ser, empapa de vida toda mi esencia, mi arena y las conchas que cuelgan de mi cuello y de mis tobillos, se impregnan del sabor salado del mar, que tanto echaban de menos. Consigue robarme de mi hogar y me embarco en una travesía estimulante que me deja en un paraíso de corales, con bellos peces que nadan a mí alrededor mientras yo me siento en esa utopía que las olas buscan en mi .
Hay muchas olas pero cada una te hará sentir nuevas sensaciones y emociones.

El mar, paraíso de emociones .Baúl de deseos y sueños.

Insthar Malar

(21/01/2009)

domingo, 7 de junio de 2009

DIA DE INSTHAR


Hoy, 7 de junio de hace un porron de años, nacio en una familia humilde una niña de ojos claros y enormes. Aunque debil en apariencia y en salud, en su interior guardaba un poder aun mas grandioso que el mismo sol. Pasaron los dias, los años y esa pequeña se fue convirtiendo en una mujer de sonrisa perenne, sosegadas formas y caracter luchador. No importaba que inconveniente se le presentara frente a ella, siempre le encontraba su lado positivo....

En su cintura pendian las Dagas de ambar verde .Insthar, la guerrera la llamaban y la temian. Pero tras su espalda ,escondia bajo su capa unas alas traslucidas y hermosas. En ella, se unia la dulzura y sensibilidad de una hada, conocida como Yaria el hada del hielo y la fiereza en Insthar. Una dualidad que siempre la acompañaba y que en la Tierra, se la conocia con el nombre de Inés.


Hoy es mi dia. Y de buena mañana han empezado a llegarme felicitaciones y regalitos de amigos y familia(por supuesto,jeje).

Muchas gracias a todos por acordaros de mi, y os aseguro que si mi sonrisa esta presente en mi rostro normalmente, hoy es mas grande ...no cabe en mi cara¡¡¡¡¡.

Un beso a todos y espero que cumplamos muchos mas juntos.


Aqui os dejo el enlace de un precioso regalo de mi amigo Calvarian (Luis).
Muchisimas gracias.


Su blog ,que debeis visitarlo porque esta repleto de historias preciosas, es
, y el regalo que ha conseguido emocionarme ....
ahi esta....




Un saludito ,Insthar

SOLO HUMO



Cerrad los ojos y escuchad lo que estas notas os muestran.
(Coda Flamenca -Extremoduro - http://www.youtube.com/watch?v=V8hri7M57k0)
Sus manos tocan mi mástil, mientras acarician sin calidez mis curvas. La tristeza emana de mi ser con notas apagadas, henchidas de amargura e implorando un cariño ya marchitado.
Me rompe el alma que su sentimiento no me pertenezca. El fuego en el que me consumo, con el roce de sus dedos por mis cuerdas, sea tan solo humo en su hoguera. Mi boca juega a la caza de una sonrisa que nunca llega, tan solo reproches e indiferencia que apagan el color de mi piel y de mi cantar.
Mientras descansa mi desganado cuerpo en sus piernas, sus brazos me arropan, un frio gélido traspasa la madera de mi cuerpo y produce escarcha en mi corazón. Su mano reposa en mi vientre, acerca su rostro a mis clavijas, tocandolas con sutileza hasta encontrar el timbre perfecto, que nunca llega. Mi espalda reposa en su cuerpo, que desesperado e impaciente, busca notas perdidas, que desprendían un sentir único y maravilloso.
Mis cuerdas se tensan, y los primeros sollozos suenan de ellas, notas que imprimen en la bailaora una angustia desgarradora y en él, tan solo un suspiro de cansancio y fastidio. Eleva su mirada al cielo implorando que este castigo termine, mientras un grito ensordecedor proclama su impotencia.
Esa noche, acomodó mi cuerpo en mi caja de satén rojo y cerro la tapa. Quiero pensar que me guardo en su recuerdo, como su mejor guitarra.


“El fuego, después de arder, ya es solo humo” - Extremoduro


Insthar Malar

(14/01/2009)

viernes, 5 de junio de 2009

INFIERNO


Las llamas braman mi nombre con insistencia, a mi paso por los caminos del infierno .He caído en las garras del demonio. Habito en el infierno bajo su poder. El calor se adentra en mi cuerpo y derrite mi alma .Hace vibrar mi interior de tal manera, que renace de él, alguien nuevo y feroz.
Desafiante, atrevida y grandiosa paseo desnuda entre pequeños demonios que relamen sus repulsivos labios deseando mis ardientes curvas, mientras en su mente maquinan perversos planes.
El fuego se proclama esencia vital de mi cuerpo, arrasando la incertidumbre, las dudas y el temor. La pasión rige esta hoguera que prende con ferocidad lo que se expone a ella. Almas hipnotizadas por su crepitar, por sus llamas que, como el cuerpo de mujer, contonea sensualmente seduciendo a los condenados, por su ardiente ser que impregna este infierno y que lo viste de riesgo y deseo.
Los ángeles esperan a la puerta de este paraiso, anhelando lo que poseemos, pero este placer que produce adicción y arrebata los sentidos hasta la extenuación, tan solo esta reservado para los atrevidos y arriesgados valientes, que no conocen limites.
Adéntrate en el infierno y saborea su fuego.

Insthar malar

(14/01/2009)

miércoles, 3 de junio de 2009

LUCIA

Un brillo mágico brota de mí ser, rejuveneciendo mi cuerpo y mi aura, que toma un color cálido y reluciente. No importa que maldad me lancen, pues rebotara en mi sonrisa y volverá convertida en rabia y envidia a su origen. Espero impaciente a mi pequeña luciernaga. Ella genera esta sensacion vertiginosa .

En esta noche, la luna me enseña su majestuosidad, su reluciente silueta, pero las nubes oscuras la rodean. En cualquier momento, ocultaran su belleza, su resplandor quedará cegado por el destino. Pero incluso cuando no pueda admirar la luna, ni las estrellas, cuando ya no pueda pasear entre los girasoles, cuando mi boca no recuerde su sabor, ni mi memoria su nombre.

Tan solo mis ancianas manos acariciaran el sillon, donde me encuentro, soñando en su piel ,mientras espero mi hora y con ella, su llegada. Un calor poseerá mi débil y maltrecho cuerpo. Pequeñas estallidos eclosionaron en las fibras de mis músculos, despertando a estos de un largo letargo. El corazón martilleara mi caja torácica, pidiendo con insistencia salir de allí. Mi respiración frenética y jadeante alertará a mis compañeros. Es la misma sensación .Aquel sentir al acercarse tu cuerpo al mío.

Me levanto de mi butaca y con torpes zancadas salgo al jardín. No reconozco su cara, ni esas curvas que, aun con mi vista cansada, se suponen peligrosas y dignas de recorrer muy despacio. No recuerdo su nombre, pero algo mas intenso no se ha marchado de mi mermada memoria. Ese sentimiento inexplicable y sincero.

Un brillo mágico brota de mí ser. Mi luciérnaga se acerca .La observo a lo lejos, mientras camina hacia mi. No puedo desviar la mirada. No puedo ocultar la luz que provoca en mí su alegre caminar, su tímida mirada. Mi cuerpo alborotado vibra sin poder dominar sus instintos. Me saluda con un guiño y un cantarín hola. De mi boca no se escucha nada, tan solo el aire silba en ese instante. Le acaricio su rostro y hago mía su dulce sonrisa.
Ha llegado mi hora, y ella esta allí conmigo. Una paz blanca y fresca se adueña de mi cansado cuerpo y de mi doliente alma. Me coge la mano.

“Nunca mas te soltare, preciosa luciérnaga”

Lucia. Ahora la recuerdo.

Aunque no la veas, sentirás su luz.

Insthar Malar

(09/01/2009)

lunes, 1 de junio de 2009

ESPIRALES DE COLOR



Su mano inesperadamente se posa en mi hombro, que oprime dando fuerzas a mi cuerpo inerte. Triste y desconsolada, encarcelo en mis ojos unos presos ansiosos por huir.
Aguanta un poco mas, le digo a mi yo mas dolorido. Aguanta ¡¡¡.

Su mano acaricia mi rostro dulcemente. Corro las cortinas de las ventanas de mi alma, para que ese sentimiento no se escape de mí. Quiero apresarlo, guardarlo y que nunca más me abandone. Me reconforta ese tacto delicado que me caracolea el cabello formando espirales de color. Una sensación incierta entre la tristeza de un día gris y la ilusión de una noche estrellada.

Pero pronto, me percato de que esas caricias se han marchitado, se han fugado tras la luna y me han dejado recluida en una cárcel de cristal, donde el único ventanuco que airea mis ideas, es el umbral a las sombras. La luz se va apagando en mi mirada ,hasta que un aroma,un sonido me trae a mi mente ,esa caricia turbadora y tan efímera, como el vuelo de una estrella fugaz. Se ilumina por un instante mi ser, para volver a caer en el precipicio de la tristeza.

Insthar Malar.

(04/01/2009)

ESPIRALES DE COLOR


Su mano inesperadamente se posa en mi hombro, que oprime dando fuerzas a mi cuerpo inerte. Triste y desconsolada, encarcelo en mis ojos ,unos presos ansiosos por huir. Aguanta un poco mas, le digo a mi yo mas dolorido. Aguanta ¡¡¡.

Su mano acaricia mi rostro dulcemente. Corro las cortinas de las ventanas de mi alma, para que ese sentimiento no se escape de mí. Quiero aprisionarlo, guardarlo y que nunca más me abandone. Me reconforta ese tacto delicado que me caracolea el cabello formando espirales de color. Una sensación incierta entre la tristeza de un día gris y la ilusión de una noche estrellada.


Pero pronto, me percato de que esas caricias se han marchitado, se han fugado tras la luna y me han dejado recluida en una cárcel de cristal, donde el único ventanuco que airea mis ideas, es el umbral a las sombras. La luz se va apagando en mi mirada ,hasta que un aroma,un sonido me trae a mi mente ,esa caricia turbadora y tan efimera, como el vuelo de una estrella fugaz. Se ilumina por un instante mi ser, para volver a caer en el precipio de la tristeza.

Insthar Malar.

(04/01/2009)