martes, 26 de octubre de 2010

ÁGAPE


Entre el fervor de la batalla, ella elevaba su juiciosa cimitarra, contra los salvajes enemigos que buscaban su muerte, tras regocijar sus espíritus con su sufrimiento. Cientos de golpes sonaban a su alrededor, gritos que se adentraban como sidiosas lombrices en sus oídos ,mordisqueando sus timpanos, la sangre caia del cielo ,tras brutales estoques que sacaban las vísceras, de su habitual habitáculo, dejando a su tutor, caer inerte al suelo, perdiendo poco a poco cada recuerdo ,mientras su mirada huía hacia un lugar mas hermoso, donde maldecir el momento de su incursión en tan estúpida empresa.
La guerrera giraba su cuerpo de un lado a otro ,en busca de miembros que mutilar, músculos que rajar y odio que aniquilar. Golpe tras golpe, muerte tras muerte, y los enemigos no cesaban ,cada vez eran más las hienas que corrían, en busca de su sabrosa carne , mientras su brazos agotados intentaban mantener su cimitarra en lo alto, sus piernas marcadas en sangre ,  sórdida escritura que ocupaba su piel en versos hirientes y voraces.
Un golpe certero la hizo caer ...
En el centro del convite, todas las bestias reían por su triunfo. Ella apoyó la espada en tierra y se levantó con dificultad, gritó , sulfurando a los salvajes que golpearon su rostro ,repartiendo su savia roja por el lugar.
Abatida ,no encontraba el sentido de la lucha. Una lucha estúpida, cuando cientos de bestias, te rodean deseando destriparte y saciar su sed ,con tus tiernos músculos, romper los huesos de tu cráneo y freír tus sesos a la lumbre, exquisito manjar que el capitán comerá rodeado de ninfas. Hasta los huesos serán presa de los perros, llevando al infinito su sufrimiento.
Arrodillada ,entre apestosas bocas de negros colmillos, sacó de su pernera su pequeña daga verde. Mirando a los ojos del capitán de los salvajes, con una sonrisa en sus dulces labios, describió una sutil pero penetrante linea en su cuello ...

Insthar

EN EL BUS


Hacía mucho tiempo que no subía a un autobús.
Esa mañana me puse las gafas y en mis manos, notaba el frío tacto del bisturí, de cualquier cirujano, que ansía abrir en canal ,a la última alma cándida, que descansa en la mesa camilla de su quirófano, sin importar más que el próximo descubrimiento, el gran tumor que habita en su interior o el cambio de válvulas de un corazón agotado.
Como un aventurero ,que con la antorcha en la mano, penetra por una lóbrega cueva, en busca de algún tesoro perdido o el elixir de la juventud.
Subo las empinadas escaleras del autobús, y tras pagar el billete, me paró frente al pasillo, con la decisión más importante en ese instante. Donde sentarme? . Pero acaso importa lo que yo decida, si tan solo debes mirar a los ocupantes, de tan ínfimos tronos. La señora que ocupa el asiento cercano al pasillo, dejando libre el de la ventana, pensando que los nuevos conquistadores verán demasiado esfuerzo el pedir paso, a dicho trono con vistas mágicas, a los demás trastos que circulan por la carretera.
Observar y viereis que aquellos que han descubierto una inmensa magia, que acapara toda su atención, en la farola que espera en la calle, a que algún pájaro le defeque encima, NO desean que tus carnes le opriman en un mini habitáculo en su trayecto.
 Evitar el contacto con los que viendo vuestra intención de ocupar su contiguo asiento, aceleran sus gestos torpes y lentos ,en poner sus enseres en él, mientras ponen un" lo siento ,jodete "en su rostro.
En fin, que paso tras paso, nos queda poco lugar en el bus, y si tienes suerte, algún ser amable y benevolente ,te mirara a los ojos, y te sonreirá ... apretujando su anatomía a la ventana y dejando libre tu trono. Ese que te durará hasta el fin de tu viaje ... a no ser que encuentres uno con vistas.
Pero ,si eres tan desgraciada  que no haya ninguna sonrisa perdida por el bus...siempre te quedará quedarte de pie, cerca de la puerta, tan pendiente del pistoletazo de salida como los atletas en la final del mundial de atletismo.
Porque ... siempre puedes bajarte del bus...
Y que hacer ... dejar que decidan por tí ... o decidir tú ?
Insthar

viernes, 22 de octubre de 2010

GEISER


Como me gustan estos días, en los que mis pies pisan la tierra y esta se hunde, como si un duende burlón te agarrase de los pies, y no te dejasé sacarlo. Pero, tiró de mi pierna y la saco,llenandome todo los pantalones de barro .
 Hummm, como me gustan estos días, en los que el sol brilla ,sí, pero sobre mi, hay una nube con sonrisa jocosa ,esperando a que me desprenda de mi chaqueta, para hacer caer sobre mi ,las últimas meadas de los ángeles.( que serán de ángeles, pero no creo que sus micciones tengan nada celetial, apestan como la de los mortales).
Como me gustan estos dias, en los que mientras tus botas se embadurnan de barro ,tus cuadriceps están agotados por el sobreesfuerzo de cada paso,y la tensión de llevar la puta nube sobre tu cabeza te provoca un dolor en el cuello inimaginable, a tu alrededor comienza a apestar a heces. ( sí, amigos, no estiercol de vaca, no ... una fábrica de olores humanos desagradables que conlleva una mala digestión o un abuso desproporcionado de leche, que ya sabemos que es indigesta).
 Me encantan estos dias...porque aun apestando a heces ,sabes que en cualquier momento puedes estar embadurnado de ellas y bingo¡¡¡¡ ... llega el momento en que empieza a subir la marea, y el hedor se impregna en tu ropa, y los trocitos mal digeridos de la comida de ayer, le dan un color diferente a tu cuerpo.
Es maravilloso, el momento exacto en que te miras , y ves, que lo que pisabas no era barro si no un rio de mierda gigantesco, del que es muy complicado salir, porque cualquer camino de huida conlleva caer en su poder.
Y en ese preciso momento, en que tienes el camino mas llevadero posible .... zas¡¡¡ Un geiser de zurullos te sorprende , que bien pensado  no es tan espectacular como los fuegos artificiales, pero si más economico y te muestra la variedad de tonalidades del marrón, pasando por el amarillo pistacho, incluso el negro.
Que digo yo ,que el propietario de ese, seguro que toma hierro ,porque en su caida abolló un coche, que evidentemente no podia ser mas que el mio.
Y es que ya lo dice el refrán popular ,si huele a mierda, tiene la tonalidad infinita de la mierda .... no hay duda ...que es una mierda. Y por lo conseguiente....tras el geiser ,yo debo de ser un catalogo mundial de cagadas.
Pero como es habitual en mi, siempre hay que ver el lado positivo ... y si pisar una cagadita te da suerte, estar dentro de miles ,es la reostia¡¡¡¡ .
Por cierto ,me voy a comprar el ambientador de la casa de Javi, el del anuncio ,a ver si el hedor desaparece...;)

Una cosa más, no te lamentes cuando estes lleno de mierda ... siempre puede ir a peor. Y un consejo, no dejes que se seque....jajajaja.
Insthar

martes, 19 de octubre de 2010

MUSTANG

El electrificante momento ha llegado. Introduzco la llave en la cerradura de mi coche. En el trascurso de mi entrada en el, todo lo que me rodea cambia completamente. La magia de este universo me absorve ,y comienza la trasformación. Mi melena azabache pierde su tonalidad tenebrosa ,para caer en rendida ante la luz dorada, tan solo guardando un ápice de rebeldia, en un mechon rasta que prende de mi nueva cabellera, unos sugerentes labios dejaron atrás a mi boca de frambuesa, largas piernas que me acercan a los pedales de mi maquina ( estas ya las tenía, ;)).
He notado como las agujas describian sus trazos en mi piel, marcandome con su historia. ( que digo yo, que me parece muy bien esto de convertirse en un pibon, pero ...joder, los tatuajes tb¡¡¡¡¡) .
A los mandos de mi maquina ,rugen los motores, mi pie enfundado en una bota alta de largo tacón, pisa con fiereza los pedales ,buscando la excitación de su motor, y empapando a la conductora de ella.(grrrr ....)
La música a todo trapo, la ventanilla abierta, dejando que el aire penetre en el habitaculo, dejando fluir la energia ,que emanaba de esa conjuncion, libertad, potencia y deseo.
Deseo de dejar atrás a las demás ruedas, en una salida precisa y veloz, donde las ruedas marcarian el asfalto con mi huella. La huella salvaje del instinto más básico. El deseo de sentir la carretera bajo mis ruedas, de notar la lejania del horizonte, al que nunca llegas, pero que siemrpe mantiene tu ilusión, que nunca termine esta carretera , de curvas sinuosas ,cerradas e interminables.
Acomodada en mi  Shelby Mustang GT 500, me enfrento a los intrepidos que creen vencerme, esperando que el disco se pinte de verde, y regocijandome en su incredula mirada ante mi victoria. Ahí os quedais....
- Merde .... se me ha calado¡¡¡¡
Todo sueño llega a su fin, y la melena rubia vuelve a ser azabache, y el mustang se convierte en la bala verde ( que de bala tiene poco , aunque sí que es verde), y la velocidad se la llevó el tocino, porque en mi coche no está . Bueno ,por lo menos me quedan las piernas largas, con las rodillas amoratadas porque no caben en mi mini coche. Y es que no hay nada como soñar... jajaja.
Siempre me quedará el recuerdo de mi paseo en el mustang ...

martes, 12 de octubre de 2010

ZARZAL


Abrió sus ojos, entre quejidos y lamentos. Su cuerpo retorcido sentía los incisivos pinchos de un zarzal. No se percibía ni un pequeño rayo de sol, tan solo la más pétrea oscuridad se cernía sobre su esperanza, ahogandola ,matándola.
En cada movimiento ,las heridas eran más profundas, los gritos más fuertes y el ánimo desaparecía, entre la niebla espesa de la apatía. Buscaba una salida en la dirección contraria, una huida al sufrimiento ,una escapada equivocada que la adentraba más, en el tenebroso túnel de la amargura, allí donde cada segundo su esencia era más exigua.
Las huellas del dolor se marcaron en su delicada piel y en los pliegues de su memoria, hasta que dejó de buscar una salida. Quieta, seguía notando como las agujas de esas plantas se adentraban en su piel , pero ya no le dolían ,había asumido su papel en esta historia, donde las zarzas ganan la batalla y ella tan solo, debe aguantar el dolor, hasta que estás se pudran en su adentros y invadan su cuerpo de la tristeza más áspera.
Insensible a los aguijones de las zarzas, posó su mano sobre el arbusto criminal, despacio penetraron en su carne, ante su indiferencia.No podía prestar atención a ese pequeño inconveniente, teniendo un objetivo más importante.
Sacó la cabeza del zarzal. Su rostro se baño de la luminosa gracia del sol, secando las lágrimas negras, que todavía marcaban sus mejillas. Apoyó su otra mano ,e incluso sus pantorrillas, que recibieron un duro ataque . Se puso en pie, mirando su cuerpo advirtió que sus ropas estaban arañadas,como si en una pelea con un tigre hubiera pasado las horas, aunque le gustó imaginar una escena más ardiente donde su adonis le arrebataba ferviente sus ropas.
Desprendiese de los jirones, y salió del zarzal, semidesnuda.Caminó con los ojos cerrados por la tierra de fuego del sur, dejando que la brisa le bañará su silueta.
Unos pasos más y una melodía capturó sus oídos...y que juguetonas ,sus letras llevaron la esperanza ,la alegría a su cuerpo aun magullado.

A veces el botón de reset está en la mano, otras en el corazón ,y algunas tras las orejas...lo importante es encontrarlo. Otras es un ángel el que lo pulsa, a veces alguien cercano  o simplemente aparece de la nada, como esta canción...pero lo primordial, es salir de la zarza...

Insthar


lunes, 4 de octubre de 2010

NO FEAR



Mi memoria olvidó el momento, en que esta capa negra, me cubrió la piel. Cuando un aura de pavor y desconfianza, se acopló a mi figura. El abrazo aniquilador, de una sombra que arremete con irracionales susurros, al impulso de emerger, del oscuro túnel del miedo. Un juego cruel que cercena ilusiones. La presión de su cuerpo contra el mio decrece ,permitiendote ver, a traves de su petreá nube de humo y cenizas. Me muestra la luz de los sueños mágicos.
Un paraiso idilico, donde las melodias te alzan en un claro cielo, donde el arcoiris te porta raudo, a donde desees. La sonrisa te brinda la emoción de lo inexplorable, de lo posible, de colores nunca vistos, que podrian pintar esa aura gris que te cubre. Tus brazos se estiran, acariciando con los dedos, las nubes de algodon con aroma a caramelo. Pero ... en el más maravilloso momento, donde sientes levitar, sentirte libre como una mariposa; escuchas una carcajada de soberbias y despectivas notas. Su huesuda mano de dedos alargados, te agarra del cuelo, cortando el oxigeno que circula por tu garganta, te eleva sobre el suelo, con el unico proposito, de que conczcas tu insignificante valía.
"Siempre estaras bajo mi poder, pequeña rata".
Las pizpiretas luciérnagas perecen, a manos de sus fétidos secuaces . Los colores desaparecen en la nada, los sueños son capturados y hechos prisioneros en los calabozos del recuerdo amargo, de lo que nunca sucederá.
Y tu cuerpo...va apagando la luz, que lo hacía diferente.
Dia tras dia, soy su perro faldero, aquel que corre a por la pelota lanzada con alegria e ilusion, para divertir y entretener al aniquilador, con la unica recompensa de su desprecio.
Pero, a todo cerdo le llega su san martin.
Ha llegado el momento de cortar los hilos de esta marioneta ,guiada por la mano del terror irracional.
Una mañana mas, me abre las puertas de un mundo mágico, donde sobre mi "nube azul" quemó asfalto, mientras la brisa refresca mi rostro,sintiendo la independencia ,la libertad en todo mi ser.
Mi mano derecha gira el puño, enloqueciendo a los cien caballos salvajes ,que rugen entre mis piernas.La velocidad aumenta, trasportandome al infinito. Mis sentidos mantinen la atención en él, para perpetrar el ataque en el momento idoneo.
Mi corazon comienza a latir atropellado, mi piel sudorosa, el temblos de mis manos me ratifica que él se acerca. En el preciso instante en que siento sus oscas manos sobre mi hombro, acelero la maquina.Salto sobre el asiento y con la mano derecha desenfundo mi cimitarra arabe, aquella que un noble tuareg me regalo en el desierto. Con un gesto limpio, brutal y repleto de ira, corto las cuerdas que me sujetaban, a esa caprichosa mano negra.
Pero no cesa en su empeño. Me desea. Desea tenerme bajo su supremacia. Coronarse rey de una mente inquieta, voraz de aventuras y valiente.
Es un reto inimaginable para él.
Giro sobre mi, guardando el equilibrio sobre mi maquina, que gruñe furiosa buscando accion. Levanto sobre mi la cimitarra, para aniquilar su aura oscura con un fuerte y definitivo golpe ,que cercena su maligna aura.
Un grito de dolor inundó el pasaje ,al tiempo que esa sombra desaparecia en un tornado abismal.
Volvi a los mandos de mi nube azul, que revolucione al maximo,mientras percibia como cambiaban los colores a mi alrededor.
Baje de mi nube azul, para sentir la tierra bajo mis pies y no sobre mi. Limpie mi cimitarra del rastro de su negruzco liquido de vida, para eliminar cualquier recuerdo de mi cautiverio bajo su poder. El poder irracional del miedo.
Insthar






Sólo una cosa vuelve un sueño imposible: el miedo a fracasar.Paulo Coelho